En el afán de abordar el camino de la constancia, con ustedes, mis observaciones de madrugada.
10.1.07
Como quien no quiere la cosa
La gente que hace, dice o tiene algo que incomoda de tal manera que me da pudor decirle ciertas verdades. Pero si no se da cuenta sola, alguien se lo tiene que decir: "no querés conocer mi baño? Y, de paso, te mirás en mi espejo y te das cuenta que tenés la bragueta abierta, un moco enorme en la naríz y algo verde entre los dientes?"
Los momentos en los que quiero tener privacidad; hay visitas en casa y me quiero ir a dormir; ya hicimos todo lo que queríamos en mi casa, no extrañás tu cama?; no está nada mal pero imaginaba otra cosa; no sé que me pasa, necesito un tiempo; hoy estoy complicada, lo dejamos para otro día?; y tantas, millones de otras frases que utilizamos en lugar de decir lo que realmente queremos.
Con ustedes: las indirectas.
Podemos decir las cosas que queremos en vez de dar tanta vuelta?
Por favor, es tremendo, me molesta terriblemente leer, al menos, 43 indirectas por día. En el trabajo muchas de ellas, otras en el subte cuando le dan el asiento a una señora/ita que parece embarazada y en realidad es decirle "te lo dejo porque parecés embarazada de lo gorda que estás, ponete a dieta, loca".
Y así, como quien no quiere la cosa, algunas de las indirectas más usadas:
"Vas para allá?" / "Te tomás la línea D?" = Cuándo vamos a tomar algo.
"Vas a comer algo?" = No serás anoréxica vos, no?
"No, eso ya lo hicimos hoy temprano" = Estamos cansados de tus llegadas tarde.
"Quedó bastante bien" = Creí que eras más capaz de lo que sos.
"Sí, puede ser que haya quedado mejor" = Odio reconocer que tenés razón pero no me dejás alternativa.
"Sole, tenés un minuto?" = Dejá de boludear y vení a la reunión.
"Me pasás el estado de cómo está tu semana?" = qué haces tan campante riéndote con tus compañeros?
La gente me dice: "pensás demasiado"= sos muy paranoica.
No, no es que sea paranoica es que la gente abusa de las indirectas y no dice lo que piensa. Me embola verlas pasar frente a mi ojos riéndose de mí, "sí, soy otra indirecta más!!! HA HAHA!!!". Eso me lleva a agarrar la indirecta en el aire y traducirla inmediatamente a una directa, a una verdad y a que la gente me llame "Lalo" que según ellos deviene de "la loca".
19.12.06
Me di cuenta que había Crecido
Creo que el grado de paciencia tiene mucho que ver con lo que le genera la otra persona a uno y pasa; mágicamente, de un momento a otro, uno pierde la paciencia. Es un segundo, milésimas de segundo y casi que ya no hay vuelta atrás. Pienso que uno muestra la hilacha cuando pierde la paciencia. Surge toda la ira interna y se descarga en un maldito teléfono, en una vaso que se rompe, en una portazo, en un grito, en un comentario hiriente o descalificador, en una puteada. Muchas veces estoy buscando algo a la mañana, apurada, llegando tarde como siempre: dónde carajo están las llaves?! Eso es lo primero que me sale después de buscarlas durante diez minutos que parecen veinte.
Cuando cruzo palabras o discuto con alguien demasiado paciente me encanta llevarlo al límite y verlo perder la paciencia, es una de las mejores maneras de conocer lo peor del otro.
Controlarse y alargar la paciencia hasta donde más se pueda es un ejercicio al que me he entregado estos últimos años. La técnica que más uso es contar hasta diez y decirme a mí misma palabras como: tranquila, no te alteres, controlate. Pero, de repente, siento un calor que me empieza a subir por el cuello hasta las mejillas y juro que siento que saboreo la ira, sobre todo cuando estoy sola y no hay nadie que me juzgue o tilde de loca. Y cuando logro descargarme y la descarga es cada vez más leve porque la técnica me funciona, me doy cuenta que estoy grande.
Estas son pequeñas cosas que dan la pauta de que he crecido:
Cuando me di cuenta que tenía miedo de salir sola a la calle después de las 12 de la noche.
Cuando dejó de darme terrible vergüenza que se me vea la tirita del corpiño.
Cuando empecé a usar el término "trasnochar".
Cuando me empezaron a preocupar mis uñas.
Cada vez que me doy cuenta que pienso cada palabra que voy a decir.
Uf, son muchas, eso es lo que más que hizo dar cuenta que había crecido.
¿Cuándo te diste cuenta que habías crecido?
11.12.06
Los Pasos
Los pasos que uno da en la vida para pasar de una etapa a la otra.
Los pasos al caminar por la calle.
Y los pasos para hacer un blog:
Paso 1: pensar para qué tendría un blog si no sé qué decir.
Paso 2: sentirme adulada cuando me preguntan: para cuándo tu blog?
Paso 3: pensar un nombre para el blog.
Paso 4: pensar qué escribir.
Paso 5: seguir pensando qué escribir.
Paso 6: escribir un post que releí tres meses después y no entendí qué quise decir.
Paso 7: escribir algo divertido.
Paso 8: escribir algo.
Paso 9: escribir lo que tengo ganas sin pensar en hace cuanto que no subo nada, ni si es divertido ni si ofende a alguien. La opción de no entrar es para todos.
Paso 10: todavía no llegué a ese, 10 en nada.
4.12.06
Juicio a Mi Cerebro
Ya tengo todo preparado: en primer lugar una declaración jurada de dos renglones donde relato toda mi noche de ayer:
"hola, cuánto es la entrada? gracias. qué buena musica. qué buena musica. qué buena musica. hola? hay alguien ahí? Sole llamando a cerebro. Sole llamando a cerebro. Biiiiip:"toy en otra, dejá tu mensaje después de la señal" ." (y firma)
Y, además de la declaración, también preparé un reclamo intimando a que me devuelva el día de ayer. No recuerdo nada. Quiero saber dónde están! Dónde se llevaron mis recuerdos! Quiero ya esas cuatro horas que no recuerdo! Me robaron! Me estafaron! "La cinta Gonzalito, la cinta!!".
Claro, el señor cerebro le ordenó a mi mano que saque plata del bolsillo, que le diga al barman, "somos tres, queremos tres tequilas" y que me tome todo el shot. Eso es abuso de poder. Eso es demagogia señores!!!
Pues, ya ven. Estoy recaudando más cargos en su contra. Para eso, me he puesto a disposición de ella, la diva, la más preciada y sobrevaluada: Cito a declarar... a la memoria.
27.11.06
Don´t Lie To Me!
Por más energía que se tenga, positivismo o afirmaciones, las cosas nunca vuelven a ser como antes. No lo intenten, no se gasten, traten de inventar situaciones nuevas con personas nuevas con ropa distinta, cambien de estilo, visiten lugares que jamás visitarían, todo suma cuando les cedan el asiento en el colectivo, banco o subte. Yo hago eso, yo pienso que un día me van a dar el asiento y me voy a sentar para inmovilizar mi cuerpo y viajar con mi mente a todos esos lugares adonde mi cuerpo ya no puede ir.
Recolecten toda la información que puedan camino al asiento cedido.
En resumen, no se qué escribir, mi cerebro está exprimido, un saludo a todos lo que me conocen y a los profesores que nos cedieron las horas.
4.11.06
La Guardia Urbana
No conozco una sola persona a la que le caiga bien esta gentuza.
Son molestos, buchones e inútiles. El otro día eran las once y media la noche y uno de ellos me entretuvo largo rato. Una pobre chica parada en la esquina de Cabildo y Juramento. No se dan una idea, les describo la situación: tendría entre 23 y 37 años, no se sabe. Excedida de peso. Uniformada con ese pantalón poco favorable y esa campera estampada atrás que dice "sí, soy yo, y por acá no cruzás" o "Guardia Urbana" que es lo mismo. Se paraba en la esquina del semáforo de Cabildo mirando que nadie cruce hasta que el hombrecito cambie y dé la orden "adelante" y giraba todo su peso hasta la esquina de Juramento, o sea unos 2 metros, y hacía lo mismo. Me colgué mirándola un rato largo desde un bar. Llegué a las 10.30 pm, hice el pedido, demoraron un montón en traerlo, comí, fumé, hablé verborrágicamente con mi acompañante y cada tanto pispeaba. A los dos minutos de observar me di cuenta del patrón de su tarea: ahora acá, ah ya cambió, ahora voy para allá, vuelvo para acá, vuelvo para allá. Una monotonía exasperante. Además, lo más inentendible de todo es que se paraba firme en esa esquina mirando a la gente ir venir y la gente le pasaba por al lado cual poste o... cual semáforo, ¡nunca corrigió a nadie! Los peatones cruzaban por donde querían y en cualquier momento y la tipa no hacía nada! Me indigné. Después me empecé a preguntar "qué hace esta tipa ahí? Ni siquera hace lo que tiene que hacer, por qué está ahí parada a las doce y cuarto de la noche haciendo nada con un uniforme despreciable?", "¿Cuál es su leiv motiv?". No entiendo, no entiendo, hasta que lo entendí.
Cuando me levanté de la mesa, agarré mi cartera y me fui del bar lo entendí todo. Cruzo la calle como siempre, me paro al lado de ella para cruzar Juramento, arranco el paso con decisión y "prriiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!", "por favor esperá que cambie el semáforo". No, si esta gente existe nada más que para romperme las guindas a mí.
30.10.06
Las Cartas
16.10.06
Materia y Espíritu
El otro día me dio anginas y me di cuenta que fue porque tenía muchas cosas que decir y, aunque me convino callar, mi cuerpo me lo cobró con factura A para que le devuelva el I.V.A.
Es como que todas las cosas que me pasan estan directamente conectadas con mi interior lo cual no es ninguna novedad. Como tampoco lo es que la mayoría de nuestras enfermedades físicas se conectan, sin escalas, con las psíquicas. Pero también hay algo dentro de esta teoría que no me cierra. Soy una persona que piensa demasiado (y no lo digo como algo bueno) y se enferma demasiado poco y me resulta tremendamente soberbio pensar que se debe a la ausencia de falencias psíquicas. In fact, sé que no es así. Pero entonces? Cómo se explica que desde mi nacimiento a hoy mi madre se asombre de lo poco que me he enfermado en mi vida? Claro que tengo mi teoría con respecto a esto: como la mente es la monárquica controladora de todo mi cuerpo, intento controlarla yo a ella persuadiéndola de que nada que se le parezca a un virus sea bienvenido, y les juro que funciona.
En la peli/documental "Y tu qué sabes?", tocan el tema de manera científica e interesante, tanto que parece válida. Lo que pasa es que con esto de que "nada es absoluto" todas las cosas terminan por no tener fin. Lo mismo que en la peli "El amor primera parte". Ok, hay una teoría, también científica y también válida. Pero "todo es relativo", "nada es absoluto". A quién le creemos? La existencia del hombre también tiene una teoría que todavía nadie logró determinar como "la verdad de cómo vinimos al mundo". Pero se cree en Dios y todos sus nombres y variaciones relacionadas con la fe. Todo depende de lo que uno elija creer. O acaso no existen los embarazos psicológicos?
La verdad en este sentido, para mí, tiene mucho más que ver con lo que uno cree, que con lo científico. Esa creo que es la verdad.
El Juego de las Diferencias
Tengo cierta afición por la última página de los diarios. Hace ya tiempo que descubrí cómo me gusta hacer crucigramas, autodefinidos, sopa de letras y ese jueguito que te ponen símbolos todos distintos y hay que ir sacando qué letra corresponde a cada símbolo.
También descubrí que me gusta enfrentar conceptos que parecen casi sinónimos, vendría a ser como "el juego de las diferencias" pero con palabras, conceptos. Así es que hace tiempo estoy tratando de afinar cada vez más un enfrentamiento que me anda dando vueltas. Es decir, encuentro grandes diferencias y a la vez tiene tanto que ver con un planteo tan radical de las relaciones humanas que de repente los dos dibujitos se ponen muy iguales y me pierdo en un terreno demasiado abstracto.
Pues bien, los conceptos a enfrentar son: amor versus cariño.
A ver, el amor tiene mucho más que ver con lo pasional que el cariño que claramente tiene más que ver con el afecto. Pero estos conceptos comparten varias cosas: ambos son una clase de sentimiento y tanto en el amor como en el cariño hay cierto cuidado, cierto respeto, cierta consideración. Si uno se encariña con algo y de repente ya no lo tiene y lo extraña, eso es amor o es cariño. Podemos marcar una gran diferencia entre estos dos conceptos si nos vamos a un plano ejemplificador: cariño hacia un objeto y amor es hacia las personas? Aunque yo a veces siento mucho amor por una remera y no paro de usarla hasta que me canso y con el tiempo simplemente le tengo cariño.
Pero olvidémonos de los diferentes tipos de amor o cariño. Acotémoslo a personas. El amor y el cariño pueden convivir, no son excluyentes. El cariño, ¿sólo es algo como poco comprometido o es más comprometido que el amor? Aunque si existe el cariño ¿un poco de amor hay o no?
Y ¿si hablamos de ese amor que "nos vuelve locos"? Ese que nos hace hacer cualquier cosa sin sentido, ¿es un amor impulsivo sin cariño o esa es la diferencia, que el amor te hace hacer cosas inexplicables y el cariño es algo medido, racionalizado? Tal vez la diferencia es que el cariño tiene límites y el amor no. También está la diferencia entre lo que es querer y lo que es amar, el famoso ¨no sos vos, soy yo¨. Te adoro, sos lo más importante que me pasó desde que tengo uso de razón pero ya no te amo. No te soporto, me molesta todo de vos pero me volvés loco. Es un tema confuso. ¿Lo primero es querer/cariño y lo segundo es amar/amor? Mmmm...
Y aunque sí tengo mi propia conclusión, no quiero condicionar a nadie porque la idea es echar los dados y ver qué sale.
14.10.06
No envolver es de adulto
Lo cierto es que los años van pasando y "las fiestas" empiezan a perder el encanto que una vez tuvieron para mí. Hacerle una carta a este tipo del polo norte. Esperar hasta las doce para atrapar a Papá Noel poniendo regalos sigiloso a los pies del "arbolito".
Ahora en mi familia estoy dentro del grupo de los que se preocupan por ver quién se va a disfrazar de Papá Noel y quién va a distraer a los más chicos para poner todos los regalos en el árbol sin que se den cuenta. Además, ya casi no hay regalos de verdad. El árbol está poblado de lindas bolsas que anuncian el costo del regalo con una inscripción bien grande de la marca en donde fue comprado. Y el efecto sorpresa? No hay nada más atractivo que no saber, no tener la más remota idea de lo que puede haber dentro de ese paquete envuelto con papel simpático y de mal gusto. Romper ese papel, descubrir algo.
Por eso, yo trato de pasar las navidades donde hay muchos niños con ilusión y muchos padres con ganas de alejarlos de la pérdida de la inocencia aunque sea por una Navidad más. Y aunque "esté grande para esas cosas", envuelvo el regalo por grande o chico que sea y no le dejo en la bolsa, la sorpresa es más chiquita que cuándo aparecía Papá Noel de manera invisible pero en este mundo de adultos, se le parece bastante.
9.10.06
Estar Aburrido
Voy al cine y cuando salgo me doy cuenta que me aburrí toda la película. Salgo con un grupo de gente con el que decido no salir más porque me aburre. Dejo de leer un libro, cambio de canal, viajo con la mente para no escuchar conversaciones que me aburren. Al final, un día me di cuenta que todo me aburría y justo enganché un capítulo de Seinfield y me divirtió. Entonces empecé a ver muchos dvds de Seinfield hasta que me aburrió. Un día me prestaron un libro de Paul Auster y me entretuvo, entonces leí como cinco de él hasta que me aburrió y me pasé a Fontanarrosa. Un groso, pero es increíble, también me aburrió. La verdad que es un bajón. Creo que la clave es no profundizar mucho en las cosas y asignarle una medida justa para no aburrirse. Así, cree esta lista de límites:
Libros del mismo autor: máximo 3
Películas del mismo director: 3
Salidas con un mismo grupo: 1 vez al mes.
Hasta hacer la lista era aburrido.
Finalmente, supe la causa de mi aburrimiento: mi exceso de soberbia. Le pedí un break a la soberbia y empecé a darle más de una chance a todo. Pero cuando dije: "pará, el programa de Polino no es tan malo", entendí que había ido demasiado lejos. Así que le dejé un mensaje a la soberbia: "Hola, soy yo. Estás ahí? No quise ser tan dura, me perdonás? Me gustaría volver a intentarlo si vos querés. Bueno, llamame y hablamos, si?
Y cuando me aburrí de esperar que me llame, me sentí feliz.
3.10.06
Un aporte. Una historia.
Así, el 87,4 %, son temas que me tiran y yo reinterpreto a gusto y piachere.
En muchos casos en vez de tirarme un tema, me tiran el tema y me lo desarrollan. Nada me molesta más que eso porque empiezan a condicionarme en qué escribir y qué no: "Escribí sobre los nombres de las calles", no es lo mismo que: "escribí sobre los nombres de las calles que parece que un día se dieron cuenta que había muchas con nombres masculinos y cuando empezaron a urbanizar Puerto Madero se reivindicaron poninédole a todas las calles nombres de minas: Alicia Moreau, Juana Manso, y bla bla bla". No! Ahí ya no escribo porque no me dejan decir lo que quiero, lo que quieren es que alguien publique lo que ellos piensan! Abrite un blog, loco! Y esa es la idea del día de hoy. Una de esas personas, no sólo me tiró un tema sino que lo escribió. Y para incentivarlo a que abra su propio blog, y se de cuenta que no tiene absolutamente nada que ver con algo inalcanzable o de mucho tiempo, aquí va su tema, que está bueno y muy bien contado. "Esta es... la historia del día:"
Leer El Email un Género Literario
La cosa es asi : Yo fui a 3 escuelas primarias. En la ultima de ellas pase 3 años. Los ultimos 3 añitos de mi tierna y un poco conflictiva escolaridad primaria. Quinto, sexto y Septimo grado. Para mi, sinceramente es una etapa pasada, sin mucho glamour, ni pena, ni gloria. Esta ahi, como un viejo cachivache que guardas en el fondo de un armario oscuro. Pero no parace ser lo mismo para todo mis ex compañeros. Alguna vez ya habian organizado alguna reunion de ex alumnos (te repito escuela PRIMARIA) y me habian invitado, y yo desde ya no habia asitido. Una mezcla de desinteres, y si, porque no un poquito de fobia. Yo realmente, te confieso, siento muy justificado mi desinteres. Porque habria de ir a una reunion con un monton de gente que no veo desde el año 1987 ? A hablar de que ? Con que objetivo ? Bueno, la verdad es que vos un poquito me conoces, y sabes que no me entrego a lo social sin estar convencido, primero de que realmente me interesa socialbilizar con esa gente. Y claro, como podria estar convencido de que quiero charlar (DE QUE ?!) con gente que no conozco... porque, vamos... pasaron casi 20 AÑOS !!!..... bueno... tal vez me comprendas, tal vez no.... la cuestion es que hace unos diez dias me incluyeron en la lista de mails y encontre que no me queda mas remedio que leerlos cada vez que llegan a mi casilla (y creeme que son muchos !). Y para mi sorpresa veo que muchos se acuerdan donde se sentaban, y se acuerdan anecdotas y cosas que yo... yo... yo ni me acuerdo de como se llaman ellos.... y ellos se tiran flores, y en mails largos y emotivos se cuentan lo felices que estan de volverse a ver, lo bien que la pasaron en la reunion... y... y.... Hernan Birman, era el rubio o el morocho ? se dicen que se quieren mucho y hasta hablan de los otros "fobicos" que no quieren ir, y que nos van a obligar.... dios mio... no se si reirme, llorar, o tener miedo.... Hago un habeas corpus ? Pido proteccion al gobierno ?
Una chica... que en aquel entonces fue amiga mia, hija de un ex socio de mi viejo, y actualmente anorexica, no para de mandarme mails, invitaciones a HI5, y otros grupos de gente online, insitiendome, invitandome y casi advirtiendome a través de todas mis casillas de mail que "no te podes quedar afuera", y que a veces "es bueno tener nostalgia, porque eso quiere decir que en la vida nos pasaron cosas buenas"... yo me pregunto... "quiere decir que nos pasaron cosas buenas, o que NO NOS PASO NADA MEJOR ?"
No me hago ni me creo el superado, me parece que evidentemente yo transite otro tipo de camino, porque esta claro que yo no tengo afinidad ni interes por el grupo, pero adentro mio quedo el eco de esas palabras.... eco que resuena en este email también...
21.9.06
Llegó la Alergia
Después miré mi reflejo en la ventana del subte y me descubrí toda de colorado, hasta las uñas!
Después me llegó un mensaje de texto que decía: “Felíz primavera!”.
Ahí lo comprendí todo. Por qué mi papá nunca se afeitó el bigote. Por qué vinimos al mundo. Cuál es nuestra misión en este planeta. Qué es la vida. Y descifré qué es el tiempo. En eso descubro un cartón con gomitas para el pelo en mi falda, estudié los colores, los comparé con toda mi vestimenta, y me perdí buscando un peso en mi cartera. Viajé mentalmente hasta mi mesa de luz, recordé que dejé toda la plata al lado de los aros, estornudé tres veces seguidas, deseé tener carilinas en algún lugar y empecé a sentir una inconmensurable incomodidad al no poder corroborar si todo estaba en su lugar en mi cara después de estornudar. La gente me miraba, algunos se detenían en mi naríz. Tendré algo? Me pasé la mano reiteradas veces y a partir de ahí empecé a desesperarme por un espejo y fue en lo único en que terminé pensando.
Llegué al trabajo y a muchas de las chicas les habían regalado flores. Odio las flores. Es decir, no me gusta que me regalen un ramo de flores, mucho menos si es una, y mucho mucho menos si es una rosa. Pero el día de la primavera quiero mi flor! Me corresponde! Todas tienen una menos yo, pensé. Y luego recordé el mejor regalo que me hicieron en el día de la primavera: “Como es el día del estudiante pero también el de la primavera, no puedo más que regalarte, esta flor de lapicera.” Una parker de madera, sofisticada, espectacular. Y como me encanta escribir fue un regalo tan pertinente que me dio envidia de mi misma.
Llegó la alergia. Llegó la primavera. Me quedan doce horas para conseguir la flor que me corresponde. Esa es mi misión el día de hoy.
16.9.06
Neuronas Sindicalistas
Después de muchos o pocos años de trabajar en gran variedad de rubros y puestos, este es el primero que le exige a mi mente vacaciones.
Eso me deja dos opciones: cambiar de trabajo o dejar de pensar.
Igual, en esta época del año todos solemos pensar en vacaciones.
Cuándo me las tomo para que me rindan más? Es mejor tomárselas tipo en marzo para amortizarlas a lo largo del año?
La verdad es que a mí siempre me dio lo mismo. Para mí lo importante es tomármelas no cuándo tomármelas.
Y, mientras miro los zapatos de una señora en el subte a la que nadie le dio el asiento, arrancan las preguntas: Adónde voy? Con quién? Cuánto tengo para gastar? Pago las clases de pilates igual para no perder el lugar? Playa o montaña? Y si me voy sola? Me voy los quince días al mismo lugar? Esta es 9 de Julio? ####! Me pasé y llego tarde otra vez!
14.9.06
La Memoria
Igual, mi condición de "memoriosa" tiene un comienzo y no es justamente el día en que nací, claro está. De hecho, es a partir de cierta edad. Cuando se trata de recuerdos de la infancia pierdo cualquier tipo de competencia, por mucho o por poco.
Es decir, creo que tengo gran capacidad de memoria a partir de los... ¿13?
Antes de eso, nada. Bueno, casi nada.
Acá van los "casi":
Me acuerdo que tuvimos un perro que fue envenenado por un/a vecino/a.
A los cuatro, más o menos, me estaba poniendo un tapado y por la manga salió una araña que trepó por mi cuello. De ahí mi aracnofobia.
Me acuerdo que nos cuidaba una chica que también limpiaba la casa y faltaba todo el tiempo porque le tenía alergia al polvo; y mi mamá se indignaba.
Me acuerdo que comía chicles bazooka, leía el horóscopo, lo rompía en diez pedazos y lo enterraba para que se cumpliera.
Una vez mi hermnao me invitó a tirarme desde el techo de mi casa cuando estaba en obra y me golpeé la boca contra las rodillas.
Me acuerdo que el sweater del colegio que me tejió mi mámá me quedaba apretadísimo y corto de mangas.
También recuerdo cuando tuve varicela y me dejaron encerrada en el cuarto mientras miraba por la ventana de mi cuarto como el resto juagaba en el jardín.
Me acuerdo de los vasos verdes de sprite que decían: "la tenés clara".
Y me acuerdo que todos me decían que vivía en la "luna de valencia" todo el tiempo porque me olvidaba todo el tiempo de todo y mi mamá me hizo millones de estudios, convencida de que tenía (o faltaba) algo en mi cerebro. Nunca hallaron pruebas.
6.9.06
La Felicidad
Por lo tanto, hace dos minutos estuve felíz. Entré al homebanking de mi cuenta bancaria, pagué las facturas por vencer y le hice una visita al último resumen de mi tarjeta de crédito: qué felicidad, por favor! Tengo al menos 5 planes de cuotas que terminan este mes! Nunca fui muy fanática a las tarjetas de crédito, por eso tampoco tengo tanta experiencia en el tema. Pero leí cuota 06/06, cuota 04/04, cuota 02/02, cuota 03/03 fue realmente mágico, mágico y nuevo. Eso quiere decir que cerré pequeños ciclos en mi vida. Hay algo más placentero que eso? Sí, por supuesto que sí, pero este es nuevo. Nuevo, insignificante y superficial. Pero nuevo al fin.
29.8.06
La Desdicha
La desdicha de morirme de dolor de muela y me den turno para el mes que viene.
La desdicha de morir joven.
La desdicha de conocer a alguien a destiempo.
El destiempo es una variante del tiempo más molesta aún que el propio pasar de los segundos.
Mientras yo salía del chat, esa persona justo estaba entrando. Cuántas veces pasaron ese tipo de cosas y siguen pasando?
Estuvimos en el mismo lugar, a la misma hora, hablamos casi con la misma gente pero nunca nos cruzamos. Esa persona con la que estás esperando cruzarte, está justo al lado tuyo pero eso que tanto deseás jamás va a ocurrir. Porque la casualidad tiene la característica de ser inesperada. Aprendámoslo de una buena vez.
Pero no. Uno sigue mirando esa esquina, a la misma hora. Sigo tomando el subte, religiosamente, a la hora exacta en que me crucé aquella vez, y nada.
Dejemos de buscar que sucedan cosas que no dependen de nosotros o hagamos que sucedan y dejemos de buscar.
Entregarle al destino con moñito de regalo nuestra suerte es comodidad. Comodidad de no enfrentarse a los hechos o de dejar que el resto haga lo que nosotros estamos esperando.
¨Si tiene que ser, va a ser¨. No querido o querida. Va a ser si vos querés que sea. ¿Y cuándo no depende de uno? Y, cuando no depende de uno es cuando se hace presente el detestable destiempo. Es el amor de tu vida, le admirás, le querés, todo lo que nunca te pasó con nadie pero tiene anillo y dos hijos. El trabajo que estabas esperando en la empresa que querías pero acabás de quedar embarazada. Cuando se conocieron él quería estar sólo y ella de novia. Cuando se separaron él quería estar en pareja y ella viajar por el mundo.
Conocer gente a destiempo deja un sabor amargo. Ajustemos las agujas, cronometremos los relojes y dejemonos de vivir pensando en lo que podría haber sido, porque eso es vivir a destiempo. Comámonos un caramelo y a otra cosa.
23.8.06
Los Tiempos Muertos de la Vida
Las paradas en otros pisos del ascensor
Las demoras en los subtes
Las caídas de sistemas
Los llamados que dan ocupado
Los títulos de las películas
El peaje
Los embotellamientos
Las colas
La carga completa de una página web
La espera de la copia de un cd o dvd
Esperar que se seque el esmalte de uñas
Los números equivocados
Un mail que vuelve undelivered
La recarga del flash en la máquina de fotos
Reiterados intentos con el encendedor
Reabrir el freezer al toque que lo cerraste
La espera en la máquina de café
La búsqueda del código de un producto
El reconociemiento laser de un código de barras
La cajera nueva
Prender un fósforo y que se apague al toque
Que el colectivero se pase de la parada
Qué más? Qué mas?
8.8.06
Cuerpo en Mente
Lo cierto es que no es así. De hecho, escribir, tal vez, agiliza neuronas pero el cuerpo está basicamente inmóvil, cosa que me perjudicaría bastante si no me gustara bailar por ejemplo, o caminar que es otro de mis hobbies. Pero por alguna razón, detesto ir al gimnasio. Así que salgo a caminar musicalizando el paisaje a mi gusto. Lo cómico es que muchas veces contrasta tanto que me dan ganas de hacer un cortometraje.
Quizás suene algo irónica, pero este es mi blog, no voy a justificarme. Siempre, mientras camino con los auriculares rebosando de sonido, voy cantando mentalmente lo que escucho. Incluso a veces vocalizo y otras, cuando quiero verbalizar, me meto en calles menos transitadas para poder explayarme. La cuestión es que a veces verbalizo lo que escucho, es decir, canto. Y canto en inglés, no es un inglés perfecto pero me alcanza para disfrutar a mi gusto. Y de repente, estoy tarareando ¨don´t wanna be an american idiot¨ y se presenta ante mis ojos un chico vendiendo flores o pidiendo monedas. Y en ese momento pienso: “qué contraste tan grande. Yo acá, caminando con mi Ipod escuchando y cantando música en inglés; un idioma que tal vez nunca tenga posibilidades de comprender este chico”. Y me da culpa loco. Me da culpa saber que, por la música, no escucho lo que me pide y, la verdad, no necesito escucharlo. Me da culpa no darle nada. Así que a veces me paro y le pregunto si quiere algo del kiosco, y me contesta: “No, plata dame”. Y justo en ese momento empieza a sonar un tango interpretado por Adriana Varela, lo que provoca que siga caminando, sin darle plata y sin culpa, mientras pienso: "por eso no voy al gimnasio. No me gusta ni la rutina, ni que me digan lo que tengo que hacer".
3.8.06
El Pochoclo: un testigo
Me gusta entrar al cine con cosas escondidas en mi cartera que no están permitidas comer.
Detesto perderme los trailers y comerciales previos.
Me gusta que la gente pida silencio o grite para que apaguen las luces.
Si metí muchos pochoclos en mi boca y cuando estoy a punto de morderlos se hace un silencio en la película, espero con la boca inmóvil una parte en la que haya más ruido.
Odio meterme muchos pochoclos bien acaramelados en la boca y encontrarme con los pedacitos duros que nunca se cocinaron.
Odio la gente que llega tarde, pide permiso, pasa por adelante y se sienta al lado mío.
Me gusta escuchar los comentarios que se hacen entre ellos los que están a mi lado.
Me gusta reírme en momentos inoportunos.
Me fascina reírme antes de que el resto lo haga.
Me encanta ir al cine cuando no hay nadie y la sala es casi toda mía.
Las películas francesas las voy a ver un día que se que no va a haber casi nadie y me siento lejos de cualquier persona. Son peliculas muy silenciosas y se escucha hasta cuando saborean un caramelo.
Me encanta poner los pies en el asiento de adelante aunque haya gente.
Odio que pase uno del cine y me haga gestito de ¨sentate bien¨, ¨bajá los pies¨, o símiles.
Me gusta ir al cine a ver películas pochocleras con personas que tengo códigos y hacer comentarios cómplices por lo bajo.
Si la película no me atrapó, le hago comentarios a mi compañía durante la película.
Me indigna que pongan los subtítulos en blanco.
Odio que ni bien salgo del cine me pregunten si me gustó.
Nunca aplaudo al final de películas, ni el director ni los actores ni los guionostas me están escuchando.
Siempre que leo frases grandilocuentes trato de acordarmelas, pero no lo logro. Aunque aquí van las que me acuerdo: "Seven days..."