27.11.06

Don´t Lie To Me!

No me mientan más. No importa cuánto espíritu joven se tenga, el cuerpo cada vez resiste menos aunque no quiera, aunque deje de fumar, aunque no haya fumado nunca. El cuerpo se desgasta como esa remera colorado furioso que ahora rasguña vida, ocupa lugar en el placard y mendiga un poco de color, ruega no ser lavada para evitar el encuentro con el diabólico centrifugado que la deja arrugada y con la etiqueta afuera.
Por más energía que se tenga, positivismo o afirmaciones, las cosas nunca vuelven a ser como antes. No lo intenten, no se gasten, traten de inventar situaciones nuevas con personas nuevas con ropa distinta, cambien de estilo, visiten lugares que jamás visitarían, todo suma cuando les cedan el asiento en el colectivo, banco o subte. Yo hago eso, yo pienso que un día me van a dar el asiento y me voy a sentar para inmovilizar mi cuerpo y viajar con mi mente a todos esos lugares adonde mi cuerpo ya no puede ir.
Recolecten toda la información que puedan camino al asiento cedido.
En resumen, no se qué escribir, mi cerebro está exprimido, un saludo a todos lo que me conocen y a los profesores que nos cedieron las horas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Nada más patético que: "Señora, ¿me dice la hora?"... Fuck! El tiempo pasa, nos vamos poniendo viejos. Y, bue, ¿qué le vamos a hacer? Sólo nos queda aparentar ser pendejos, hacernos un tatuaje y cantar un tema que sepamos todos junto a un fogón en Las Toninas tomando una birra y haciendolo girar y girar y girar para olvidar esta triste envejecida realidad.
C u!