2.6.18

La Bronca

En seis días se cumplen diez años del último cumpleaños que pasaste con nosotros.
Tardé un montón, pero diez años después llegaría una nueva nieta a tus brazos. La segunda que no llegó a conocerte.
Con la primera que no conociste, te volvías a morir. No sabés lo que es esa chica, mami. La personalidad, lo sensible, lo creativa. Y ni hablar de verlo a Mariano padre. Te emocionarias.
Con la segunda que no vas a conocer y que yo tampoco conozco todavía, andá a saber qué relación hubieran tenido.
Diez años después, lo único que me da bronca es que te pierdas de tus nietos. Es lo único. Todo lo demás te lo entendí en vida, te lo entendí cuando te fuiste y te lo entiendo ahora. Extrañar te iba a extrañar mas tarde o mas temprano llegara tu partida, siempre te extrañaré.

Te vi abuela con tus primeros dos nietos y eras lo más. Tan lo más que ellos se re acuerdan de vos y eso que eran re chiquitos.

No veo como una tragedia que no estés. Solo me doy cuenta de eso: me da bronca.

En cuatro meses, si todo sale bien, voy a conocer a Azul; y una de las cosas que mas disfruto de pensar es "¿sacará algo de mamá?"
Te aviso que le pienso contar todo, no solo lo bueno. Que estabas un poco loca, que tenías un incansable corazón solidario, que eras capaz de regalarle tu mundo a cualquiera que lo necesitase, que cambiabas de humor como pestañeabas, que eras re criticona, clasista, nostálgica al extremo, impulsiva sin remedio, que con los años te volviste ermitaña pero que antes de eso tu carcajada marcaba el paso de noches de juegos entre amigos en el living de casa, que cocinabas como si fueras nutricionista y cosías con mas amor y talento que una verdadera diseñadora de indumentaria. Que pasabas de restaurar muebles a poner membrana con brea en el techo de casa, cortabas el cerco de tres lotes sola, plantaste 600m de pasto "quicuyo a quicuyo" con paciencia -la jardinería era tu terapia- y arreglabas la máquina de cortar el pasto con resina con la misma certeza que batías huevos.
Que tenías la habilidad de transformar un garage en un hogar con dos o tres inventos decorativos y que bailabas con ritmo envidiable pero sobre todo con tanta, tanta clase.
Me viene siempre a la mente el recuerdo de que en unos de los deptos. en los que vivía sola, llegué de trabajar un día y me habías cambiado toda la instalación eléctrica del PH.
Eras definitivamente una caja de sorpresas.

Me dejaste la vara un poco alta porque tus dones de madre, todos los que recuerdo, me hacen sentir un poco mas pequeña de lo que saber que voy a ser mamá me provoca en el cerebro y en todo mi cuerpo. Pero lista, ma, re lista para enfrentar todo los desafíos que ser mamá suponen.

Bueno, solo para hacerte saber que ahora, seremos dos con mi sangre las que te vamos a extrañar. Porque Azul no te conocerá viva, pero te puedo asegurar que te va a conocer.

16.2.18

#lodije

Siento que las redes sociales estan destruyendo algún tipo de reputación que remotamente se habría podido ir formando sobre mi persona profesional.
#lodije

2.1.18

El mito del calendario

Es increíble cómo la edad te quita la inocencia, la ingenuidad de entregarse a lo dado sin cuestionar tanto.
Desde los nueve años que no creo más en papá noel y desde los 39, confirmadísimo, que no veo mas un año terminar y otro empezar. Es todo una misma línea de tiempo en la que debemos aprovechar para aprender lo mas posible para así poder aplicar ese conocimiento a la vida diaria y así disfrutar mucho mas de cada minuto sin perder el tiempo con pelotudeces como criticarle la vida al otro o juzgar, entre otras muchas imbecilidades que cometo.

El fin de año es como "el lunes empiezo". Un calendario que intenta medir el tiempo y así en la mente del humano poner objetivos para cumplir en cierta medida de tiempo y sentirnos menos frustrados o mas frustrados. O menos contentos o más contentos, siempre con nosotros mismos para después cambiar/mejorar la manera en la que nos relacionamos con el prójimo.

Siento que he podido modificar muchas cosas y muchas, muchas otras estan ahi, estancadas, con la raíz metida hasta no se dónde y cuesta tanto mas erradicarlas. Pero hay que darle lucha. Cavar y cavar. Poco a poco.

Las oportunidades de cambiar estan ahora mismo, en este minuto. Si estás eligiendo seguir por el mismo camino, your call.

Esta es la frase que dice mi primo, Juli, instructor de yoga, al final de cada clase a la que yo he ido con él:

"Que tengamos serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, valor para cambiar aquellas que puedo y sabiduría para reconocer la diferencia."

Qué fin de año ni fin de año.
Acción, reflexión y aprendizaje.
Nada mas.