Todavía

Todavía fumo. Todavía tomo café. Todavía tengo mal humor si me levanto muy temprano. Todavía me encremo después de bañarme. Todavía puedo correr el bondi. Todavía uso all star. Todavía desayuno tostadas con café con leche. Todavía pienso mucho. Todavía hablo mucho. Todavía no me tiré de paracaídas. Todavía no soy dueña. Todavía no manejo. Todavía no quiero manejar. Todavía uso sólo ropa que me parece cómoda. Todavía no aparento la edad que tengo. Ya uso zapatos con taco, a veces. Ya uso polleras cortas, seguido. Ya uso shorts, todos los días. Ya me copé con los vestidos. Todavía pienso que si no me pongo las pilas el tiempo se adueñará de mi cuerpo. Todavía a veces duermo con el maquillaje puesto. Todavía veo a mis amigas del cole. Todavía me hago amiga de mis amigas. Todavía adoro viajar en auto por la ruta tomando mate y escuchando música. Ya conocí Londres. Ya conocí New York. Ya conocí algo de Cuba. Ya fui a Madrid y a Barcelona, y también a Roma. Ya me metí en mar de Costa Rica. Todavía no fui a Cabo Polonio ni a La Pedrera, ni a Mar Chiquita, ni al Norte Argentino, ni a Usuhaia, ni a París, ni a Berlín, ni al resto del mundo. Todavía le guardo rencor al facebook. Todavía soy escéptica pero todavía le abro la puerta a la curiosidad y leo el horóscopo cada tanto. Todavía pienso en cosas que ya no debería. Pero todavía tengo muchos todavía que cambiar y muchos todavía que me gusta mantener, aunque no deba. Porque todavía soy un poco rebelde a mis propias reglas.