13.7.10

7 centímetros

La ausencia absoluta de inspiración es la que me motiva. Qué cosa, no? Será que la nada misma no existe? La nada habla de la ausencia de algo, por lo tanto la presencia de otras cosas, o me equivoco? Ojalá. Me gustaría estar equivocada en tantas cosas. De dónde surge el deseo de equivocarse? Y de dónde el miedo a errar? Con el tiempo descubrí que el miedo a equivocarse es inútil cuando se piensa en los resultados, pero útil a la hora de reflexionar y pensar en consecuencias. Pero pensar en las consecuencias no es más que suponer, o me vuelvo a equivocar? Estaba pensando en la facilidad de palabra, en la gente reservada, en el cambio de ánimo que sufrimos en un sólo día, en el silencio, en los fanáticos del silencio, en la gente que prefiere encerrarse a exteriorizar. Estaba pensando en las caras de la gente porque hoy tuve que ir al banco. Y, a pesar de que podría ser un interviniente imposible de obviar el hecho de que todos estabamos haciendo una fuckin cola en un banco, me dí cuenta de que la gente que tiene los años marcados en la cara conserva una expresión de angustia, de enojo, de desconformidad. Esa es la palabra, desconformidad. Como si todos estuvieran rebelados a lo que el pasar de los años deja pero también resignados y, hasta algunos, peleando con furia en su mirada las cosas malas y reteniendo con las pestañas las cosas lindas. Y seguí pensando; qué cosa agradable sentirse recuperado, restaurado. Creo que la única forma de llegar a eso es parar. Paremos la pelota muchachos, miremos la cancha. Es una gran hinchapelotez preguntarse todo el tiempo "qué estoy haciendo con mi vida?", además no es sano. Pero cada tanto, gente limmmda, hay que hacerlo. A mi me gustaría caminar por la vida con la cara marcada por los años y una especie de mínima, pequeñísima sonrisa cada cuadra que camino. Sostenerla. Sino, los pendejos nos miran y nos ven feos, obvio. La palabra "adulto" da miedo. Y dá miedo. Y los olores? Los olores de chicos, los olores de grandes, el olor a pucho, buácala!
Ay, pero Soledad, qué te agarró??? De repente te importan los chicos y lucir alegre cuando seas vieja?? Si querés morir joven!!!
Bueno, bueno, bueno. Que no me estoy doblegando a nada, esa es tarea del tiempo y todo llega. Además, no querer llegar a vieja tiene mucho más que ver con que hago lo que tengo ganas de hacer HOY. Me encanta fumar, por ejemplo, aunque haga mal, me encanta. Y de vieja seguro tendré mis consecuencias por eso.
Simple y finalmente, después de taaaanto tiempo, descubrí de qué soy fanática. De observar. Aunque ver a la gente cambiar, transformarse en cosas que nunca imaginaste o, sencillamente, verlos atravesar una etapa, puede ser casi como confuso, no sé. Las personas comiendo. Las parejas peleando, las que recién empiezan, las que se nota que están acostumbradas, la gente mayor con dificultad para caminar, la gente bailando que se ve muy divertida si no escucho la música que ellos escuchan, los gestos de asco, debería existir un manual sobre el lenguaje de las cejas. Te diste cuenta de todo lo que dicen? Ojo con las cejas. Imaginate una persona sin cejas. Qué haría sin mi vista?, pensé de repente. Probablemnte, tendría que empezar de cero con muchas cosas, que se asemejaría con a volver a la fuente y, tal vez, con volver a inspirarse. Cuánto había entre ojo y ojo? Y si hubiera menos que lo que hay cómo se vería el mundo entero?

1 comentario:

Stan O'Neal dijo...

"Sino, los pendejos nos miran y nos ven feos, obvio. La palabra "adulto" da miedo. Y dá miedo."

Jajaja, tal cuuual...

Con respecto al manual sobre el lenguaje de las cejas, nunca leiste a Paul Ekman, o viste la serie Lie to me?

Te la recomiendo....

besos